sábado, 27 de julio de 2013

Llegaste.

Y entre las nubes vagas de ese día, el cielo azulado y la tormenta tan calma de la noche anterior, dejaste entre ver tus labios color carmesí. Miré de repente con el ojo que mas ve, el del corazón, como era que te acercabas a mi, como era que te quitabas esa angustia de antaño y te ponías a dormir entre mis brazos. Miré y otra vez, y más que todo lo que una vez se fue, vi tus labios que danzantes frente a los mios, dejaban entre ver lo que era la realidad de nuestro presente. Algo mágico que, meses atrás, nada pudo verlo venir.
Quizá fue lo que me diste, lo que tanto me cautivo, lo que tanto me dejó ser como soy, lo que por tanto tiempo esperé y añoré y que ahora, después de un tiempo de conocernos, me dejaste ver.

He buscado palabras mas grandes para cada cosa que siento,
palabras para decirte lo feliz que me haces,
palabras para describir lo hermoso que son tus labios al danzar de un beso,
palabras para decirte canta filosofía se me ocurre cuando estas conmigo,
palabras para decirte cuanta vida se podría vivir si conmigo estuvieras,
palabras para decirte cuantas estrellas han mirado nuestros sueños y ahora, que ya nuestros labios se han besado, cuanto regocijo les ha dado.

Llegaste. Como un haz de luz entre mi cielo nublado. Como ese haz que penetro las nubes grises de soledad, e irrumpió cada recóndito lugar de mi mente. Miré tus manos junto a las mías y desde aquel momento, no las quise soltar. Quisiera cumplir el sueño de ser libre y ser lo contigo, de saber que podríamos andar descalzos por la vida y así mismo, caminar por los prados verdes, llenos de vida, llenos de ese polvo de estrellas, que cada noche caería sobre nosotros.


Un personaje una vez me dijo, quisiera poder hablar con las letras y decirte todo lo que alguna vez escribí. Eso haría, te diría todo en prosas, con versos conjugados de ansiedad, con gestos mimados de querer, con sueños amados de futuros mejores, con noches llenas de esas crema estelar, esa que cubre nuestros sueños.

Tu sabes.
El tiempo se hace vano cuando estamos los dos.

Recknoker.
Y Salimos de las Sombras.







No hay comentarios:

Publicar un comentario